Y llegó el nuevo "Día D", 20 de enero 2021, que marcará un antes y un después no sólo para Estados Unidos sino para el resto del mundo por estar en riesgo las libertades individuales tan celosamente resguardadas por la quizás ex capital libertaria del mundo.
Hay que reconocer que el lado depredador comunista es siempre muy eficaz. Estudia a su presa, le detecta los puntos débiles y "zas" lanza su zarpazo.
Cual galán socialité que endulza el oido de la chica ingenua con palabras que llenan sus vacíos emocionales detectados previamente por él, así mismo los fraudulentos demócratas dirigieron sus esfuerzos manipuladores a temas sensibles como el racismo, la inclusión, ecología y la utópica igualdad. Disfrazando sus verdaderas intenciones, apoderarse de la meca económica mundial y seguir esparciendo con mayor facilidad sus equivocadas y egoístas políticas económicas.
Nada hay de noble en igualar a los ciudadanos en la pobreza, porque en pobreza es que termina todo país que cae tercamente en las garras del Comunismo. Ciudadanos pobres que miran desde abajo como la élite gobernante disfruta de lo que les quita a diario mientras se pasea descaradamente en sus Ferraris.
Tan triste como ver caer al vacío a algunos norteamericanos enamorados de utopías es triste ver a algunos venezolanos foráneos creyendo todavía en discursos humanistas hipócritas. Así de poderoso es el idealismo, puede cegarte aunque las pruebas de fraude estén frente a ti y sean iguales a las experimentadas en tu país de origen, Venezuela.
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