Punto ciego

Destruir la economía de un país además de crear pobreza generalizada crea amargura generalizada. Y en este contexto depresivo toda grieta social subyacente como discriminación racial, de género, transgénero, clase social, tiende a empeorar. Por eso se debe votar con la cabeza y no con el corazón. De manera de escoger la alternativa política cuyo modelo económico favorezca y conlleve a la prosperidad y no aquella que conduzca a la quiebra económica por concentrarse en programas sociales desaforados, compulsivos.

El sentimentalismo exacerbado al final acrecienta el problema social que se quiere eliminar. Este punto ciego emocional siempre convertirá en presa fácil de villanos a los ingenuos en cualquier aspecto de la vida. Se ve en el romance, se ve en la economía.

Siempre he creido que lo ideal es humanizar al capitalismo no execrarlo, porque históricamente el modelo funcional ha sido el Capitalismo y ninguna manipulación mediática podrá cambiar eso.

El nuevo Día D

Y llegó el nuevo "Día D", 20 de enero 2021, que marcará un antes y un después no sólo para Estados Unidos sino para el resto del mundo por estar en riesgo las libertades individuales tan celosamente resguardadas por la quizás ex capital libertaria del mundo.

Hay que reconocer que el lado depredador comunista es siempre muy eficaz. Estudia a su presa, le detecta los puntos débiles y "zas" lanza su zarpazo.

Cual galán socialité que endulza el oido de la chica ingenua con palabras que llenan sus vacíos emocionales detectados previamente por él, así mismo los fraudulentos demócratas dirigieron sus esfuerzos manipuladores a temas sensibles como el racismo, la inclusión, ecología y la utópica igualdad. Disfrazando sus verdaderas intenciones, apoderarse de la meca económica mundial y seguir esparciendo con mayor facilidad sus equivocadas y egoístas políticas económicas.

Nada hay de noble en igualar a los ciudadanos en la pobreza, porque en pobreza es que termina todo país que cae tercamente en las garras del Comunismo. Ciudadanos pobres que miran desde abajo como la élite gobernante disfruta de lo que les quita a diario mientras se pasea descaradamente en sus Ferraris.

Tan triste como ver caer al vacío a algunos norteamericanos enamorados de utopías es triste ver a algunos venezolanos foráneos creyendo todavía en discursos humanistas hipócritas. Así de poderoso es el idealismo, puede cegarte aunque las pruebas de fraude estén frente a ti y sean iguales a las experimentadas en tu país de origen, Venezuela.

El sagrado derecho ciudadano de denunciar un fraude

Recién leí en inglés el discurso "Save America" del 6 de enero de Donald Trump y en ningún momento llamó a la violencia.

Los demócratas quieren criminalizar el derecho de la ciudadanía a denunciar y exponer un fraude en toda su grotesca dimensión, y no es justo.

La violencia que se desató en el Capitolio vino de una de estas dos vertientes: del extremismo de algunos republicanos, sobre lo cual la responsabilidad recae en la decisión personal de cada uno de ellos, recuerden el libre albedrío. O de alguna componenda para crear caos y luego inculpar a los republicanos de hechos violentos, considero posible en gran medida este segundo escenario debido al comportamiento desleal, censurador, fraudulento y antidemocratico que ha presentado el partido Demócrata durante aňos y con mayor vehemencia en el tiempo reciente.

Cual sea el caso, considero que Donald Trump está libre de culpa en esos hechos.

El hizo lo que correspondía hacer, denunciar el fraude e instar al pueblo a acompaňarle en esa honrosa tarea y le admiro por eso. Ojalá Henrique Capriles, en Venezuela, hubiese mostrado ese mismo guáramo, hubiese conservado nuestro respeto.

Trump y su equipo legal presentaron las evidencias pertinentes y estas fueron descaradamente desestimadas por jueces corruptos o que estaban bajo amenaza de personajes oscuros.

Así que considero a Donald Trump un héroe, y los demócratas en su siniestra ambición lo están convirtiendo en un mártir. Les regresará el bumerang que lanzaron, y será interesante verlo.